Por Juan Tomás Valenzuela
Atiborrada de gente
esta Marcha del Millón,
tiene temblando a Rondón,
a Leonel y al presidente,
al grupo de delincuentes
que controlan el senado,
a Pechito, Maldonado,
a Temo, al Procurador
y a uno que otro malhechor
del periodismo empeñado.
Se escuchó a los politólogos
denunciar que el Colectivo
ya se había desvanecido,
en predicciones de astrólogos.
Los infelices coprologos
haciendo sus vaticinios,
hablaban del exterminio
del grupo de Marcha Verde
y aunque esto no se recuerde,
¿Quien olvida a Belarminio?
Este enano hipofisario
privando en intelectual,
por un pote de Brugal
había descrito el calvario
que el grupo de visionarios
había pasado en su intento,
y hasta fingiendo lamento,
sentenció que el colectivo
ya se había desvanecido
por la falta de sustento.
¿Y donde pondrán la cara
con esta Marcha tan bella,
los cerdos del grupo Estrella,
Consuelo y Rubén Bichara?
Los de la cárdena piara
que se frotaban las manos,
creyéndole a los gusanos
de programas matutinos,
que anunciaban que el camino
de la marcha iba a un pantano.
Pues señores… ¡Aquí estamos!
no llegamos al millón,
pero esta concentración
de verda es un mar humano.
Todos juntos, mano a mano,
en esta gran caminata.
Y que sepan lo piratas
que intentaron agredirnos
que nadie va a dividirnos,
porque’sto es ¡Fuego a la lata!
MOVIMIENTO VERDE